Nos encontramos en plena época de cenas de verano de empresa. Este es ese momento donde se deben aparcar los aspectos laborables y donde debe haber la opción de establecer y mejorar las relaciones personales.
Aunque te den la opción, no hay elección. No acudir a este tipo de eventos suele ser más comentado que acudir y meter la pata.
Estos son unos consejos
No llames la atención de forma negativa:
– No bebas demasiado
– No te vistas de forma estridente
– No bailes cómo si estuvieses en Fama
– No critiques ni presiones a nadie
– No te pongas pesado con los selfies
– No hagas bromas sobre los sueldos ni pidas un aumento
– Y por favor, sobretodo, no intentes ligar. En nada volverá a ser lunes. Intenta no ser el protagonista del cotilleo.
Ya sabes cómo va:
– Nadie será puntual, deja los cinco minutos de rigor y no vaya con demasiada hambre
– Habla sinceramente, interésate, intenta hacer teambuilding
– Intenta saludar a todo el mundo, hasta los que no veas nunca y saca tu mejor sonrisa
– Por muy horrible que sea el restaurante y por muy mala que sea la comida, ¡nunca digas nada! No te quejes
– ¡Ni una palabra sobre el trabajo! Hay muchos más temas de conversación.
– Decide la hora de tu marcha con cabeza. Una retirada a tiempo es una victoria.